En el principio érase el nin, “espíritu bajo disciplina,” y de ahí surgió el Sennin, el “maestro-sabio del nin,” el maestro-estratega, el sabio-iluminado de la Quinta Dimensión.
Ubicación: ESTUDIO ADICIONAL DEL PLEXO
Estado Anímico: Sereno
Estado Físico: Frio
Estado Cognitivo: Analítico
El Ojo del Águila, el Espíritu del Carcayú: Ya es tarde: son las 7:47AM, llevo casi dos horas levantado. Hasta ahora he incorporado una de las listas de correcciones a “El Sendero de Julio Wolf” que me envió una amiga, aún tengo las correcciones de dos de mis alumnos que incorporar. Definitivamente el tema del mes ha sido “Julio Wolf” o “JW” como lo llaman en el Ryu. Me ha sorprendido la acogida que ha recibido la obra hasta el momento. Hace 21 años y 29 días exactamente terminé un manuscrito que era más bien un boceto de detalles biográficos, de memorias que quería preservar. Pero no era buena literatura. Le faltaba mucho, lo supe entonces aunque me acuerdo que en el momento no supe el qué, luego, al poco tiempo me di cuenta: había contado hasta las anécdotas más dolorosas de mi vida pero como quien habla de un trauma sin recolección emocional del mismo, en un estado de disociación mental y emocional que se reconoce como patológica. No había emociones, solo eventos y ningún escrito que no mueva el mundo emocional del lector puede calificar como literatura, mucho menos BUENA literatura que siempre ha sido mi propósito producir y no contaminar el acervo literario con más porquería de la que ya está presente. Pero por igual entendí perfectamente por qué la ausencia de contenido afectivamente provocativo – no fue fácil la primera vez al vivirlo, revivirlo con fines de transmitir las emociones experimentadas tampoco resulta en ciertos momentos agradable. De hecho, resulta mucho menos que ‘poco agradable’ el volver a recrear en uno mismo el fondo de un abismo de angustia existencial para lograr describirlo es agotador. Los recuerdos de mi familia original – padre, madre, hermano, y yo – que se perdió con el divorcio de mis padres revividos dentro de la realidad presente de la pérdida de mi última –familia – mis hijos Alex y Julia – abrieron un túnel muy oscuro y doloroso que duró lo necesario para la creación artística correspondiente. No sé hasta qué punto y en cuantos lectores logro inspirar la profunda soledad del personaje, pero lo que sí sé que es cierto es que los 21 años fueron bien esperados ya que solamente a raíz creo de mi Gran Entendimiento he logrado la capacidad de voluntariamente alzarme por mi solo de cualquier estado emocional indeseado – aunque me lleve horas lograr el cambio total. Lo malo de escribir algo como Julio Wolf – el lobo solitario en un mundo de perritos falderos y chuchos arrabaleros – es que nunca estoy del todo desconectado ni siquiera conscientemente de esa realidad interior en la que vive y de la que precisamente emprendí un largo sendero para dejar atrás. El cómo dislocarse de nuevo una articulación para poder contar como siente el dolor. Afortunadamente, sin embargo, se desarrolló un “factor mutante de curación acelerada” para resanar rápidamente la herida. Pero el dolor, aunque en este caso evitable, se invoca por una buena causa: JW es la piedra de toque que hace mucho más comprensible el resto de mi obra – ya sea literaria, filosófica, sociopolítica o marcial. JW es la clave para que MAMBA – y la figura del Sennin – sean más asequibles.
Lo interesante es el proceso de investigación a través del cual no solamente retrocedo a mis apuntes de hace 21 años, sino incluso estoy releyendo libros que había leído en la época descrita para lograr una mejor comprensión del contenido mental del personaje. ¡Y qué personaje! Me sorprende, al re-leer el material, el darme cuenta de la madurez intelectual y emocional del joven Julio y de reconocer las raíces de lo que tardaría décadas en manifestarse como MAMBA. Eso es consagrarse a una misión de vida. No muchas personas en la historia creo han tenido una trayectoria de vida tan clara, tan definida – ni ha habido tanto que sintieran (que fueran conscientes de) tanta necesidad por tenerla. La necesidad es la madre de la invención y la oportunidad el padre.
Ayer encontré, en el transcurso de mis “retro-investigaciones”, una cita atribuida a Genghis Khan: "En la medida en que mi llamado es alto, las obligaciones que me incumben también son fuertes, y me temo que mis decisiones puedan dejar algo que desear." Me recuerda a la tensión interior que a veces experimento entre el monje recluso y el general guerrero, entre “aquí está el camino para quienes se interesen y sean capaces” y “síganme yo os mostraré el camino en persona”. Pero bueno, ya es tarde y toca cambiar por unos días a otro Gran Proyecto - VIPERS – conforme prosigo en el esfuerzo de atar los cabos sueltos de mi vida. Primer paso: Organizar una “Biblioteca VIPERS” al igual que preparé una “Biblioteca Julio Wolf.”
El ojo que se ve
El filo que se corta
No preciso escudo.
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