domingo, 4 de marzo de 2012

Domingo, 4 de marzo, 2012 REPORTE INICIADO A LAS 4:39 PM: “Kwi Kwa Ju”


En el principio érase el nin, “espíritu bajo disciplina,” y de ahí surgió el Sennin, el  “maestro-sabio del nin,” el maestro-estratega, el sabio-iluminado de la Quinta Dimensión. 

Ubicación: RECAMARA PRIVADA
Estado Anímico: ACEPTABLE
Estado Físico: AGOTADO
Estado Cognitivo: LÚCIDO

El Ojo del Águila, el Espíritu del Carcayú: Es tarde; llevo más de una hora levantado y aun no he producido nada de renombre. Hace algo de frio en el cuarto, sobre todo después de haber ingerido una malteada proteica con yogur y leche fría, y para cuando me fui a tomar la leche con café ya se había enfriado. Me quedé dormido viendo un episodio de Kung Fu, despertándome a las 3:00 AM inquieto con la vejiga llena, e inquieto por mi falta de productividad hasta ahora este fin de semana. Estoy haciendo investigación sobre el carcayú para un mi “novela dentro de la novela”, además de una serie de cuentos. He adquirido videos, libros de mitos, y libros y artículos sobre la historia natural de este increíble bicho que me fascinado e inspirado desde niño, y mi propósito es inmortalizarlo por diversos motivos. Por un lado quiero que se le haga justicia de una forma que inspire, tal como me ha y sigue inspirando a mi – sobre todo siendo uno de mis principales animales de poder. Hay nueva información que no se tenía cuando yo era chaval que resalta algo extraordinario respecto al rol del padre en la formación de las crías, ¡y aun de las crías adultas con sus propias crías! Algo verdaderamente insólito en el reino animal. El carcayú macho resulta formar una relación polígama y estable – una especie de harén – cooperando en la formación de las crías de sus diversas parejas femeninas en su territorio, y estableciendo vínculos duraderos con sus hijos, incluso varones, aún cuando que éstos tienen sus propias crías. La función del patriarca es una principalmente de protección y sobre todo de enseñanza en el arte de ser “un carcayú”.

Por otra parte, el carcayú o “kwi kwa ju” para muchas tribus indígenas, es una figura primordial en su mitología – ideas que inspiraron por ejemplo, la historia de “el carcayú y la conejita”. Entonces estoy adquiriendo el conocimiento detallado tanto de los mitos como de la realidad, para crear por una parte una serie de cuentos breves, mitológicos, y por otra una novelita que se incorporará dentro de la novela de Julio Wolf. ¿Qué forma tomará esta novela dentro de la novela, en que perspectiva narrativa se contará?  ¿Quiénes serán los personajes? Sin dudas será un cuento de Omayok el Grande, eso está más o menos decidido, pero lo demás aún no. De momento el capítulo 13 de Julio Wolf está escrito en mi cabeza y cuando haya avanzado bastante en cuando al trabajo de investigación sobre el carcayú. (¡Rayos mi hombro derecho está hecho polvo!)

Mientras, VIPERS tuvo sus avances la semana pasada pero me quedé corto de mis metas – no siempre son realistas y a veces, muchas veces, son deliberadamente así: hay que apuntar a las estrellas para llegar a la luna.

El ojo que se ve
El filo que se corta
No preciso escudo. 

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